Los incidentes forzaron la dimisión del presidente de la Federación, José Ortega, siendo elegido sucesor Juan Padrós. El torneo, impulsado dos años antes por Juan Padrós, cuando era presidente de la Federación, estaba apadrinado por el rey Alfonso XIII, quien cedió un trofeo que debía entregar su hijo. Ambos organismos tenían como progenitores o bien …